Para el presidente del Líbano, Israel es el único beneficiario de la crisis mediooriental

El presidente del Líbano, general Emile Lahud, presidente de turno de la cumbre árabe, sostuvo que Israel es el único beneficiario de la crisis que azota a Medio Oriente y llamó al cumplimiento irrestricto de las resoluciones internacionales. El mandatario dio a conocer sus opiniones acerca de diversos hechos de la región, a través de un comunicado difundido por la presidencia. Respecto de la decisión del Congreso de los Estados Unidos de considerar a Jerusalén como capital de Israel, Lahud señaló que ésta “no respeta la verdad histórica de esa ciudadsagrada, que ayer fue y continúa siendo hoy, capital de Palestina, lugar de encuentro de religiones. Por otro lado, esta medida ignora la legitimidad internacional que considera que Jerusalén pertenece a los territorios árabes y que la ocupación israelí debe terminar, cumpliendo con la Resolución N° 242 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El gobierno libanés se aferra a una Jerusalén árabe y a los valores religiosos que han dado perspectivas humanitarias y espirituales a esta ciudad, y rechaza toda decisión o medida que apunte a convertirla al judaísmo, y que falsifique su verdad histórica”. Respecto de la crisis con Irak, el mandatario libanés sustuvo su temor de que una acción bélica en perjuicio de ese país “tendría consecuencias que afectarán la seguridad y la estabilidad en varios países del Medio Oriente, además de las influencias negativas en las relaciones entre los países árabes y los Estados Unidos”. Lahud consideró también que “Israel es el único que se beneficia con lo que sucede en Medio Oriente, y saca ventaja de todo hecho negativo a favor de su política contra los palestinos o los países árabes vecinos. Israel aprovechó los ataques del 11 de septiembre de 2001 para implementar distintas alternativas de agresión. Por otra parte, utilizó la amenaza norteamericana a Irak para concretar sus planes en contra del pueblo palestino, sus líderes, sus instituciones políticas, sociales y sanitarias y evitar de esta manera, el surgimiento del Estado independiente”. El presidente insistió en “la aplicación de las resoluciones internacionales, sin discriminación alguna. Es decir, así como las resoluciones internacionales fueron expedidas en virtud de la situación en Irak y se apeló al cumplimiento de las mismas, también existen resoluciones que tratan la crisis de Medio Oriente y que deben ser cumplidas. Elegir dentro de este marco, pondría de relieve la neutralidad de la ONU y su confiabilidad”.