Argentina da ejemplo de convivencia con una carta interreligiosa Convocados por la Secretaría de Culto, dependiente de la cancillería de la Argentina, representantes de las tres confesiones monoteístas firmaron hoy en Buenos Aires un documento relacionado con la actual crisis en el Medio Oriente y su eventual repercusión en el país.
Por Ricardo López Dusil
La declaración, titulada “La vocación de paz y el diálogo entre las comunidades”, llama a la convivencia pacífica entre los grupos humanos con diferente profesión de fe y fue suscripta por el presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Luis Grynwald; el presidente del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA), Samir Salech, y monseñor Horacio Benites Astoul, en representación del Arzobispado de Buenos Aires, así como por el secretario de Culto, embajador Guillermo Oliveri.
Al acto, del que también participó el jefe de gabinete de la Cancillería argentina, embajador Agustín Colombo Sierra, asistieron representantes de las diversas confesiones.
“Convocamos a los hombres de buena voluntad -dice el documento- a recapacitar y advertir que la violencia no tiene una matriz espiritual, dado que los valores supremos de la vida y la paz revisten una santidad única e incomparable que es, al mismo tiempo, una de las mayores coincidencias de todas las confesiones”.
Los firmantes indican que “la violenta adversidad coyuntural que se desarrolla en Medio Oriente nos duele profundamente, y aunque podamos sostener visiones particulares y hasta divergentes sobre el tema, esto no debe doblegar nuestro esfuerzo de honrar la larga tradición que nuestra sociedad tiene en materia de convivencia plural, la cual debemos continuar profundizando para exhibirla al mundo como modelo.”
El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, dijo que la firma del documento tiene una enorme significación por el momento en que se suscribe y habla de la madurez y responsabilidad de los dirigentes comunitarios del Judaísmo, el Catolicismo y el Islam para seguir sosteniendo los vasos comunicantes a pesar de las adversidades. También destacó Oliveri la larga tradición argentina en materia de respeto a las libertades de conciencia y religiosa, así como al diálogo interconfesional, que el gobierno “se siente obligado a acompañar y estimular”.
Dijo que el sentido del documento suscripto es hablar de paz y dar desde la Argentina “una pequeña ayuda y un pequeño ejemplo de convivencia para el resto del mundo”.
Por su parte, Colombo Sierra dijo que la iniciativa está en línea con la aprobación en la recientemente concluida Cumbre del MERCOSUR de un repudio al enfrentamiento armado y una demanda de cese del fuego, como lo hicieron posteriormente otras personalidades mundiales.
La Argentina, un país con mayoría de católicos, ha tenido a comienzos del siglo pasado una importante corriente inmigratoria de musulmanes y judíos. En los años 90 sufrió dos brutales atentados de matriz antisemita que dejaron un centenar de muertos.
Pese a ello, las dirigencias musulmana y judía del país han desarrollado una intensa labor en beneficio del diálogo. El año pasado, en otro hecho inusual, ante el fallecimiento del entonces presidente del Centro Islámico, Adel Made, se ofreció un significativa ceremonia en su homenaje en la sinagoga más importante de Buenos Aires. Representantes de las tres confesiones han constituido recientemente el Instituto del Diálogo, entidad que ha trabajado incansablemente para fortalecer ese legado.
El texto completo de la declaración es el siguiente:
“En un mundo preocupado por la fragilidad de la paz, la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), el Centro Islámico de la República Argentina (CIRA) y el Arzobispado de Buenos Aires, con la convocatoria de la Secretaría de Culto de la Nación, se sienten en la obligación ética de hacer un firme y racional llamado a la paz.
“Convocamos a los hombres de buena voluntad a recapacitar y advertir que la violencia no tiene una matriz espiritual, dado que los valores supremos de la vida y la paz revisten una santidad única e incomparable que es, al mismo tiempo, una de las mayores coincidencias de todas las confesiones.
“Como ciudadanos argentinos integrantes de esta diversidad de tradiciones religiosas y culturales afirmamos que debemos y podemos hacer un aporte al diálogo, basado en el respeto por la diferencia y en la convicción de que tales diferencias, lejos de constituirse en obstáculos para la integración, nos enriquecen.
“Hace falta valor, prudencia y una buena dosis de generosidad para aceptar al otro, enriquecerse con su singularidad y construir espacios comunes que nos contengan a todos.
“Instamos a las comunidades locales a continuar trabajando en aquello que nos une y convocamos a ser mancomunadamente responsables en la tarea cotidiana, acompañando el mensaje de concordia con aquellos con quienes podemos ejercer influencia. La violenta adversidad coyuntural que se desarrolla en Medio Oriente nos duele profundamente, y aunque podamos sostener visiones particulares y hasta divergentes sobre el tema, esto no debe doblegar nuestro esfuerzo de honrar la larga tradición que nuestra sociedad tiene en materia de convivencia plural, la cual debemos continuar profundizando para exhibirla al mundo como modelo.
“Somos hijos e hijas de una herencia muy rica en ese sentido, que se ha visto potenciada en los últimos años con madurez y generosidad, desde quienes tenemos responsabilidades en nuestros respectivos ámbitos religiosos y comunitarios y también desde la Secretaría de Culto, que ha estimulado, generado y acompañado muchas de las acciones emprendidas.
“Aspiramos a que estas palabras sirvan para que cada uno de nosotros, no importa la fe que profese, se proponga reflexionar con profundidad sobre los valores universales que compartimos, como lo viene promoviendo el Instituto del Diálogo Interreligioso.
“Finalmente, hacemos una apelación a quienes desde los medios de comunicación pueden ayudarnos a transmitir y difundir los valores más profundos de paz y encuentro.
“Firman este documento: Luis Grynwald, presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA); Samir Salech, presidente del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA); S.E.R. monseñor Horacio Benites Astoul, por el Arzobispado de Buenos Aires, y embajador Guillermo Oliveri, Secretario de Culto de la Nación.”
La fuente: El autor es director periodístico de elcorresponsal.com y autor del libro “Todos bajo el mismo cielo – diálogos entre las culturas católica, judía y musulmana” (Edhasa).